«No, yo soy tu padre». Bien con la voz de James Earl Jones o con el doblaje de Constantino Romero, el mundo entero se agarró a la butaca y sintió una punzada en el corazón: Darth Vader era el padre de Luke Skywalker y las cosas ya no serían igual nunca más. Probablemente solo dos personas sintieron algo de alivio: la princesa Leia y Han Solo. La una, porque así aclaraba sus sentimientos: lo de Luke -que en realidad era su hermano- y Han eran cosas distintas. Y Han Solo, porque así no tenía que meterse en peleas por la chica con el rubio con traje de karateka, que de rival y amigo pasaba directamente a la condición de cuñado. De esta manera, El imperio contraataca devenía de filme de ciencia-ficción a drama shakesperiano y la Humanidad añadió otra coletilla cinematográfica a su colección de dichos míticos. Por cierto, la mayor parte mal repetidos, y este es otro caso, porque Vader exclama «No, soy tu padre», y jamás «Luke, soy tu padre». Así nacen las leyendas.

Décadas más tarde, cuando Hayden Christensen cogió por primera vez en el rodaje de El ataque de los clones la espada láser de su personaje, Anakin Skywalker (el futuro Darth Vader), el chico no pudo resistir la tentación de hacer con la boca el mítico ruido de sable luz cortando el aire. Al igual que tres años antes con Ewan McGregor -que había hecho lo mismo- en la filmación de La amenaza fantasma, George Lucas tuvo que recriminarle su actitud por arruinar una toma y le recordó que ya había unos especialistas en efectos de sonido que se encargarían de ello. Puede que la anécdota no sea cierta, pero sirve para ilustrar -al igual que la frase sobre la paternidad de Luke Skywalker- la fuerza del cine, lo que ha marcado a millones de generaciones esta saga compuesta por dos trilogías, diversas novelas y una serie de animación. Occidente ha vivido marcado por la obra de Lucas desde el estreno de La guerra de las galaxias el 25 de mayo de 1977, por sus imágenes, sus personajes, por esa resonancia shakesperiana que da cuerpo al guión.

EL PAÍS se suma a esta leyenda y desde el domingo que viene pone a la venta las tazas de Star wars, al precio de 0,50 euros, con otra frase mítica: «May the Force be with you» (Que la Fuerza te acompañe). Las siguientes entregas serán los sábados, en packs de dos tazas. Otra colección que añadir, para los fans de las películas, al inmenso mundo de mercadotecnia que Lucas ha sabido cuidar con mimo.

Domingo 13 de marzo de 2011, primera entrega, taza con el logo «Star Wars» por sólo 0,50€ + 2,50€ del diario del Domingo.

El diario El Pais 1,20€ cada día de lunes a viernes + 0,50€ del pack de dos tazas (6,50 €)

Sábados, cupón comodín.